Mientras que las tiendas de ropa de gama baja y media pueden llamar la atención con sus colores vivos, música alta o luces de neón, los locales de ropa de marcas premium tienen que ser elegantes y chic, lo que rara vez va de la mano de un diseño interior chillón. Al mismo tiempo, todos los locales se enfrentan al mismo reto: quieren atraer la atención de un cliente moderno. Hoy escribimos sobre cómo se puede conseguir un efecto espectacular utilizando sólo la iluminación.

SE NECESITA ALGO MÁS QUE UN CARTEL

Diseñar tiendas en la época del dominio del comercio electrónico es una tarea más difícil que hace unos años. Ahora, el escaparate y todo el local deben proporcionar al cliente más información: no sólo para marcar la existencia de la tienda y definir su gama, sino también para mostrarle la calidad y el carácter de la marca, de modo que el cliente no pueda resistirse a pasar tiempo dentro de la tienda. El abanico de herramientas publicitarias, promocionales y de merchandising visual es enorme, pero el segmento premium no puede elegir entre ellas con la misma libertad que otros representantes del sector minorista.

EJEMPLO: UN LETRERO DE NEÓN NO ES PARA TODOS

El uso de rótulos de neón es tentador: La iluminación de un rótulo o un logotipo desde el interior atrae inmediatamente la atención, envía información clara sobre lo que se puede encontrar en el local y, además, puede transmitir un mensaje atractivo sobre los valores de la marca. Sin embargo, el contexto de las lámparas de neón, que empezaron su carrera en el Times Square de Nueva York a mediados del siglo pasado, no es el que utilizarían las marcas que se esfuerzan por captar a un cliente maduro, exigente y con alto poder económico.

SUERTE QUE TENEMOS LA ILUMINACIÓN DE CONTRASTE

No es de extrañar que los carteles de neón aparezcan más en los locales de las marcas de la calle (como Urban Outfitters, Timberland o River Island), y nunca en los de lujo (como Max Mara, Fendi o Coco Chanel).
Esto no significa, sin embargo, que el segmento premium carezca de herramientas que den grandes efectos como carteles de neón u otros elementos expresivos de la decoración. Al contrario, las marcas de ropa exclusiva, son maestras en atraer la atención con la luz. Para ello, sin embargo, eligen la iluminación de contraste, es decir, lámparas LED con ópticas especiales.
Al dirigir el haz de luz de una lámpara de este tipo sobre un elemento seleccionado de la decoración o hacia la mercancía, consiguen el mismo efecto que se lograría iluminando el objeto desde el interior: un contraste máximo entre el objeto y el fondo. En consecuencia, la exposición permite:

• Llamar la atención del cliente inmediatamente (por ejemplo, hacia un cartel, un maniquí o un producto),
• Guardarse en su memoria (es más fácil recordar los objetos "brillantes"),
• Destacar la alta calidad y los detalles más pequeños,
• Construya un carácter prestigioso del interior y envíe a los clientes una clara promesa "aquí encontrará el producto de mayor clase".

LA ILUMINACIÓN SIN CONTRASTE ES COMO SI NO HUBIERA PUBLICIDAD

Hay una razón más para el uso de la iluminación de contraste en las tiendas que aspiran a los clientes más exigentes. Su ausencia produce un efecto similar al de un neón apagado o un cartel descolorido: envía un mensaje claro: "cerrado", "anticuado", "sin importancia".
Lo mismo ocurrirá con los productos que no tengan el contraste adecuado. En una escena de luz plana, el cliente detendrá sus ojos en lugares aleatorios, y los productos más importantes se convertirán en un objeto sin importancia para el cliente.
Si quieres garantizar la alta calidad de la iluminación en vuestra tienda y hacer que el diseño haga referencia a las mejores marcas del mundo, escríbenos o llámanos. Estaremos encantados de prepararte un proyecto de diseño de iluminación de contraste, que aumentará el interés por vuestro local.